La huella de Maurice Béjart, una de las leyendas de la danza del siglo XX, siguen vivas en la compañía que fundó. En esta representación incluye, entre otras, el celebérrimo 'Bolero', con música de Maurice Ravel.
El nombre de Maurice Béjart (Marsella 1927 – Lausana 2007) sigue vigente entre los aficionados a la danza cinco años después de su fallecimiento. Es la larga sombra de un mito de este género, que en 1987 fundó este ballet para “recuperar la esencia del intérprete”.
Desde entonces, el Béjart Ballet Lausane llevó a los escenarios de todo el mundo las obras soñadas por su creador, uno de los principales coreógrafos del siglo XX, dejando una profunda huella en el mundo de la danza. Todo a cargo de treinta y nueve bailarines de 15 nacionalidades distintas, forjados en la personal escuela de su maestro. En el programa que el ballet ha escogido para esta ocasión figuran dos veteranas coreografías de Bejart, ‘Bolero’ (estrenada en 1961 y con música de Maurice Ravel) y ‘Mephisto Valse’.
En el año del 25 aniversario de su formación, Béjart Ballet Lausanne mantiene vivo el espíritu de su fundador y ofrece uno de los mejores espectáculos de danza que se puede contemplar.
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